Me interesa muchísimo que cada uno de nosotros podamos conocer cuál es la voluntad de Dios para nuestra vida. Alguien puede decir: “Eso es fácil, yo sé que Dios tiene una voluntad buena, agradable y perfecta para mí; que cumpla con su Palabra”. Y eso está muy bien, pero esa es la voluntad que está escrita en su Palabra.
Hay dos maneras de conocer la voluntad de Dios: La primera es leyendo la Biblia, aquí está buena parte de la voluntad de Dios para nuestra vida, lo que Dios quiere hacer, establecer, cómo quiere que viva y lo que desea que experimente. Pero no está todo, porque aquí no aparece cuál es la voluntad de Dios con su trabajo, no aparece la mujer con la que Dios quiere que se case, ni el nombre de la persona con quien va hacer un negocio. Sin embargo, Dios tiene una voluntad al respecto de eso. ¿Qué define la voluntad de Dios para mi vida? Número uno, lo que dice su Palabra. Y número dos, es lo que se conoce como el propósito de Dios para mi vida. Le menciono algunos nombres: Abraham, Moisés, Jesús, todos tenían propósito en su vida. ¿El propósito que Jesús debía cumplir sobre la tierra es el mismo para nosotros? No. El de Jesús era salvar a la humanidad. ¿Ese propósito de ir a la cruz, de dar su vida, de sacrificarse, de que lo crucificaran es el mismo propósito para mí? ¿Me tienen que tratar de la misma forma que a Jesús? No, ese era el propósito específico de Dios para su Hijo.
Hay un propósito que es únicamente para ti, no para mí, y sólo tú lo vas a cumplir, porque Dios te ha dotado de todo lo que necesitas para hacerlo; tu propia misión, tu propia responsabilidad. Hay un plan hecho por Dios para que lo cumplas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario